Según un estudio que hemos realizado con datos de consumo eléctrico de 47.686 hogares españoles, los usuarios que más habitualmente monitorizan su gasto energético son los más contienen su consumo, pudiendo llegar a un ahorro de entre un 6% y un 19%.
Desde la llegada de los smartphones, la posibilidad de poder controlar con una app cualquier tipo de gastos como los bancarios o telefonía es muy habitual. Sin embargo, el control del consumo de energía no suele ser común y muchas comercializadoras o bien no disponen de una aplicación, o la que ofrecen apenas permite poco más que descargar las facturas y ver los contratos.
Conocer y entender el consumo son claves para lograr el ahorro energético. Poder comparar tu consumo con otros hogares similares, tener alertas de consumo elevado, anticipar el consumo previsto para final de mes, o saber cuáles son los electrodomésticos que más gastan, son funcionalidades que permiten a los consumidores controlar su consumo energético.
En el estudio hemos analizado los comportamientos de los usuarios que utilizan nuestras aplicaciones dividiéndolos en tres grandes grupos según su consumo energético anual: hogares con consumos altos (superiores a 5.256 kWh), hogares con consumos medios (superiores a 2.628 kWh en inferiores 5.255 kWh), y hogares con consumos anuales bajos (por debajo de 2.628 kWh).
Hemos recogido los datos de 47.686 hogares, de los que se han excluido los que tenían instalaciones de fotovoltaica, ya que tienen comportamientos de consumo muy diferentes. Se han recogido los datos del primer semestre de 2024 y se han comparado con los del mismo periodo de 2023. La conclusión de este estudio es clara: los usuarios que más han utilizado las aplicaciones de Clevergy son los que más han ajustado su consumo y por lo tanto su gasto.
Hogares de consumo alto (por encima de los 5.256 kWh al año)
A pesar de que las medias del conjunto de los puntos de suministro residenciales aumentaron sus consumos en el primer semestre de 2024 frente al de 2023, dentro del grupo de usuarios con consumos elevados (consumos mensuales por encima de los 438 kWh), aquellos que hicieron un uso elevado de las apps consumieron de media un 19,87% frente a aquellos que las utilizaron menos.
Aunque su consumo sigue siendo elevado, debido a contar con equipos eléctricos de climatización, las herramientas de las apps parecen haber facilitado el entendimiento del gasto que suponen estos dispositivos y, en consecuencia, han fomentado la concienciación de estos usuarios por la eficiencia energética, y por tanto el ahorro, en sus hogares.
Hogares de consumo medio (entre 2.628 kWh y 5.256 kWh al año)
Al igual que en los hogares de consumo alto, las diferencias de consumo son sustanciales pero menos notables. En estos hogares, los usuarios que hicieron un uso elevado de la app consumieron de media un 6,8% menos que los usuarios que menos consultaron estas aplicaciones.
La diferencia es menor debido a que estas viviendas con consumos intermedios muestran una disparidad mayor en los equipos de climatización de sus viviendas: no todos tienen equipos eléctricos de climatización, como bombas de calor, sino que es una mezcla entre viviendas con equipos de gas, de bombas de calor con potencia menor al caso anterior, radiadores eléctricos, calefacciones centrales, etc. En la mayoría de estos casos, el potencial de ahorro eléctrico es menor, al proceder el calor generado en los meses de invierno de equipos de combustión o de equipos no controlados directamente por los inquilinos de dichos puntos de suministro.
Hogares de consumo bajo (por debajo de 2.628 kWh al año)
En este último caso, los usuarios que hicieron un uso elevado de las apps de Clevergy, consumieron un 9,07% menos que los usuarios que no las utilizaron. Esto indica que, aunque este grupo de usuarios presenta un margen más limitado para la optimización del consumo eléctrico, el uso frecuente de la app sigue siendo efectivo para fomentar hábitos de consumo energético más responsables.
Las viviendas de este grupo tienen consumos eléctricos más reducidos principalmente por la naturaleza de sus equipos de consumo. En la mayoría de los casos, estos hogares cuentan con sistemas de climatización centralizados (calefacción central en sus edificios), lo que reduce la dependencia de equipos eléctricos intensivos, como bombas de calor. Además, su consumo eléctrico es menos estacional, ya que no dependen de sistemas eléctricos de climatización para afrontar los meses más fríos del año. Asimismo, otra característica distintiva de estas viviendas es el uso limitado de equipos eléctricos: en general, los hogares de este clúster emplean electrodomésticos básicos, como un único frigorífico y congelador, no suelen contar con secadoras, y tienden a usar con menos frecuencia aparatos intensivos como el horno.
La importancia de la potencia contratada
Además del consumo es importante controlar la potencia contratada, ya que supone el termino fijo de la factura. Más de la mitad de los hogares españoles tienen contratada más energía que la que necesitan. En un estudio publicado en 2023 por la CNMC (Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia) el 63% de los hogares españoles tenían contratado de media 1,1kW de más en las horas punta, y un 67% excedían en 1,6kW la potencia necesaria en horas valle. Sólo este dato supone un gasto extra total de más de 600 millones de € al año. Los datos del informe de Clevergy confirman este dato, siendo 3,5 kW la potencia media contratada en los hogares españoles. Las apps de Clevergy ayudan también a los consumidores a ajustar la potencia contratada para evitar estos gastos innecesarios.